La Administración estadounidense, presidida por Joe Biden, tiene previsto vender cuatro aviones no tripulados (drones) MQ-1C Gray Eagle a Ucrania, tal y como informó el miércoles la agencia británica Reuters, citando a tres fuentes familiarizadas con el asunto, que hablaron bajo condición de anonimato.
El plan ha estado bajo revisión del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono) durante varias semanas. Si bien, la venta de drones, fabricados por la empresa estadounidense General Atomics, podría ser bloqueada por el Congreso estadounidense, al mismo tiempo que existe el riesgo de un cambio de política de última hora.
La Administración de Biden planea notificar al Congreso sobre la posible venta a Ucrania en los próximos días y se espera un anuncio público después de eso, conforme a un funcionario estadounidense.
El coste de los drones y el entrenamiento de sus posibles operadores ucranianos se descontaría de un último paquete de ayuda a Ucrania por valor de 40 000 millones de dólares.
Biden anuncia nuevo paquete militar para Ucrania
El presidente de EE.UU., Joe Biden, anunció el mismo miércoles un nuevo paquete de ayuda militar por 700 millones de dólares para Ucrania que incluirá sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad (HIMARS, por sus siglas en inglés), misiles antitanques Javelin, así como armas antiblindaje.
Desde el pasado 24 de febrero, fecha del inicio de la operación rusa, Ucrania ha estado utilizando varios tipos de vehículos aéreos no tripulados de menor alcance contra las tropas rusas. Sin embargo, el dron Gray Eagle representa un salto tecnológico porque puede volar hasta 30 horas o más dependiendo de su misión y puede recopilar grandes cantidades de datos con fines de inteligencia. También, puede transportar hasta ocho poderosos misiles Hellfire.
De hecho, desde el comienzo de la operación militar rusa en Ucrania, EE.UU. y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han destinado cientos de millones de dólares al envío de armas a Ucrania. Moscú asevera que Occidente está poniendo en riesgo su propia seguridad al armar a Ucrania, pues están “echando leña al fuego” del conflicto, lo que “tendrá repercusiones trágicas”.
HispanTV