16 Dec
Cochabamba, 16 de diciembre de 2025.– El Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba atraviesa una grave crisis financiera tras el congelamiento total de sus cuentas bancarias, medida que habría sido aplicada desde el 11 de diciembre, según documentos y fuentes a las que accedió IN Noticias.
Hasta el 10 de diciembre, la Alcaldía realizaba pagos con normalidad; sin embargo, a partir del día siguiente solo se habrían registrado aprobaciones administrativas, sin que se efectúe ningún depósito ni movimiento financiero, lo que confirmaría el bloqueo absoluto de las cuentas municipales.
De acuerdo con información oficial, el congelamiento se originó en un proceso judicial coactivo iniciado por la Asociación Accidental “SOLIM”, conformada por las empresas Sociedad de Alimentos Procesados Santiago (SOALPRO SRL) y Tecnología en Alimentos (TELCAMIN S.A.). Ambas se adjudicaron en 2016, durante la gestión del entonces alcalde José María Leyes, la provisión de raciones secas del desayuno escolar.
En ese periodo, y debido a observaciones legales, la Alcaldía no habría cancelado el monto total establecido en el contrato, pese a haber recibido los productos. Ante el incumplimiento, las empresas iniciaron un proceso judicial que, tras varios años, concluyó con un fallo favorable a la parte demandante.
La justicia ordenó al municipio pagar no solo el monto adeudado, sino también multas, daños y perjuicios, lo que habría elevado la deuda a aproximadamente 50 millones de bolivianos.
Al no contar con ese monto —que no estaría presupuestado ni previsto en las finanzas municipales— la empresa activó una acción coactiva, derivando en el congelamiento de todas las cuentas del Gobierno Municipal de Cochabamba.
Frente a esta situación, la actual administración habría decidido iniciar una acción de repetición, mecanismo legal que permite al Estado exigir el resarcimiento económico a exautoridades y exfuncionarios cuando se determina negligencia o responsabilidad directa en el daño económico ocasionado.
Según los antecedentes, la empresa demandante se adjudicó uno de los lotes del desayuno escolar y, tras informes de desconformidad, solo habría recibido un pago parcial, estimado entre 17 y 18 millones de bolivianos, antes de recurrir a la vía judicial.
El congelamiento de las cuentas pone en serio riesgo el funcionamiento operativo del municipio, el pago a proveedores, salarios y la ejecución de proyectos, mientras se buscan salidas legales y administrativas para resolver una deuda que se habría originado hace más de siete años, como consecuencia de una deficiente gestión municipal del pasado.