Evo Morales no oculta su admiración por Andrés Manuel López Obrador: su triunfo en 2018, sostiene, inspiró y revitalizó a la izquierda en América Latina, abriendo la vía a una nueva etapa en la región.
“México está a la cabeza de la lucha con López Obrador”, dijo en entrevista con MILENIO, en la que celebró la posibilidad de que, por primera vez en la historia, la izquierda gobierne en los dos países más grandes del continente, si es que la campaña de Luiz Inácio Lula da Silva triunfa en Brasil el próximo dos de octubre.
Si eso ocurre, vaticinó el invitado especial del gobierno federal a los festejos patrios, la región podrá dejar de depender de Estados Unidos y afianzar sus alianzas estratégicas, con gobiernos progresistas en México, Brasil, Colombia, Chile, Bolivia y Argentina, entre otros.
En ese sentido, celebró cómo se ha gestado la transformación del entonces llamado por Estados Unidos “Eje del Mal”, -conformado por Cuba, Venezuela y Bolivia-, a lo que ahora es el “Eje de la Humanidad”.
Artífice de la nacionalización del litio en Bolivia, Morales también respaldó la decisión del gobierno mexicano de afianzar el control del Estado sobre este recurso; adelantó que Bolivia compartirá toda su experiencia. Y dejó en claro: no se puede permitir que capitales extranjeros extraigan el llamado oro blanco.
¿Cómo lo recibe México en esta nueva visita?
-Siempre recuerdo que México es como mi pueblo, me salvó la vida. Gracias al presidente Andrés, el gobierno y el pueblo mexicano. Tengo tanto los recuerdos viví acá unos meses, primero en un centro militar, después gracias a los hermanos mexicanos y a la cooperación internacional, en un pequeño departamento y luego retornamos.
Tengo muchos recuerdos.
Ver a los hermanos y hermanas mexicanas, los embajadores, todos los que hicieron todo por tanto esfuerzo hicieron para recuperar la democracia, los partidos como PT, como Morena es interesante conversar esos tiempos que vivió Bolivia.
-¿Cómo fue para usted ese momento ex presidente en el que le dan un golpe de estado y quien le tiende la mano fue el presidente López Obrador?
-Sí, López Obrador, pero también era el presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, Nicolás Maduro de Venezuela, Miguel Díaz de Cuba, el ex presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, pero el que puso la logística para sacarme, para salvarme ha sido mi hermano Andrés López Obrador. Contar el día 11 de noviembre del 2019, es contar una larga historia de un momento muy difícil, por eso el gran sentimiento de cariño del pueblo boliviano hacia el hermano Andrés López Obrador y obviamente el hermano Alberto Fernández por su papel fundamental en la democracia de América Latina. Estaba convencido que rápidamente recuperaríamos la democracia y lo conseguimos, aunque el plan del imperio era proscribir.
Acá el canciller y varios politólogos que tienen buena lectura me decían que si no hubiera salido de Bolivia hubiera sido como con Salvador Allende. El 11 de noviembre de 2019, serían las 2 a la tarde, algún cónsul dijo: “salvar la vida de Evo, es salvar el proceso de cambio”.
Felizmente ocho miembros de las Fuerzas Armadas de mi equipo de seguridad se han puesto firmes, porque ese día la policía les ofreció 50 mil dólares a los ocho para que me maten. Ahora algunos de la oligarquía dicen que están arrepentidos por no haber acabado con mi vida.
Aquí en México el presidente López Obrador constantemente alerta de los ataques de los grupos de poder para desestabilizar gobiernos, ¿son ciertos?, ¿Usted es un sobreviviente de ellos?
-La derecha nacional no es nada, pero apoyadas por el imperio, inclusive por las mafias del narcotráfico, ahí sí. Porque hay una intervención directa del imperio. En mi caso, el golpe fue fundamentalmente por el litio por parte de Estados Unidos, Inglaterra y el dueño de Tesla que financian este golpe de Estado. En países donde tienen muchos recursos naturales y bases militares de Estados Unidos, hay golpes de Estado donde aprovechan todas las oportunidades.
Cómo pionero de los gobiernos de izquierda en AL, ¿Cómo ve la llegada de estos nuevos gobiernos de izquierda, se consolida el movimiento con la llegada de Lula en Brasil?
-Cuando Fidel Castro y Hugo Chávez proclamaron la liberación del frente y decían “somos antiimperialistas, anticapitalistas”, qué dijeron los expresidentes de Estados Unidos: “el eje del mal”. En 2006, me integré al “eje del mal” y luego fue creciendo y creciendo, pero en el fondo no éramos el eje del mal, sino el eje por la humanidad.
Nosotros somos los herederos de la historia, de las grandes luchas de sublevaciones especialmente de la indígena de los tiempos de la Colonia, en el caso boliviano. Somos los protagonistas de las rebeliones democráticas. No he visto hasta ahora que en ninguna parte del mundo el sector social más odiado se organice para un movimiento político y que hagamos historia en poco tiempo. Como herederos de esa historia que empezó Fidel y Chávez, para mí los dos hermanos siguen siendo comandantes de las Fuerzas Libertarias de toda América.
-También en los últimos años, varios países voltearon a la derecha y parece que el triunfo de López Obrador en 2018 inspiró a la izquierda de LA…
-Claro. México y Brasil, siempre son una gran esperanza, son también países muy visionarios. Cuando en estos países se vuelve a la derecha se tiene que volver a la resistencia y cuando en estos países se gana hay que ir a la ofensiva contra el imperio. En México, así como Brasil siempre dan mucha esperanza a los movimientos progresistas, socialistas, humanistas y antiimperialistas.
¿Las políticas públicas del presidente López Obrador que tiene en México y los programas que llevó a Centroamérica ayudan para afianzar estas rebeliones democráticas?
-Son muy interesantes estos programas que siempre inspiran esa lucha permanente con la igualdad, pero también la paz con justicia social.
-Si llega Lula a la presidencia de Brasil en octubre, ¿se consolida el eje de izquierda y se dependerá menos de Estados Unidos?
-Totalmente. Es una articulación democrática, una revolución con mucha convicción revolucionaria. Pero también es importante que una vez liberados de la parte política, programática, social, cultural, acá tenemos una enorme responsabilidad: la liberación en ciencia y tecnología.
Desde su experiencia, ¿Fue importante la nacionalización del litio de parte del gobierno federal?.
-Sí, porque los países industrializados quieren esos recursos, mi golpe olía a litio. El presidente Andrés López Obrador va a impulsar la industrialización del litio, entonces creo que ya nacionalizó y estamos ubicando las normas correspondientes. Si los pueblos y muchos estados industrializan el litio como lo hizo México, Bolivia, Argentina, Chile estos países pueden ser potencia en todo el mundo entero. Está en nuestras manos. Una cosa es imperio y otra potencia, no queremos ser imperio, sino potencia y tomar decisiones para fijar el precio del litio en nuestros territorios.
Entonces, vamos por buen camino. Saludo las reuniones de México con Bolivia. El canciller Ebrard visitó los yacimientos de litio en mi país. Sería lindo que las universidades se especialicen en alguna carrera que especialice sobre el tema litio y tengamos científicos que salgan de otras universidades públicas para aportar en temas de la industrialización. Ve estos datos, cómo se ha disparado el precio del litio: de 4 mil 450 dólares la tonelada en 2002, a 17 mil dólares en 2021 y a 78 mil dólares en 2022.
Hay que darnos cuenta hermanos de América Latina que no podemos dejar que una transnacional se apodere de nuestros recursos y ellos industrialicen. -¿Asesorará a México para desarrollar la industria?
-Es compartir experiencias para el bien de nuestros pueblos, hemos estado en Zacatecas, esa región es muy minera y nos dicen que tienen litio y nos hemos podido contactar. Entonces vamos a contactar con los técnicos, probablemente quisieran conocer las experiencias de cómo acelerar los procesos de extracción, pero ahí hay un tema de fondo, el sector privado o transnacional no puede estar en la parte extractiva, eso es lo más importante. En el tema industrial y de mercado, sí.
-En dos años en México se renovará la presidencia, ¿El país debe seguir siendo de izquierda?
-Eso el pueblo mexicano lo decide. Nosotros quisiéramos que todos los países se liberen, pero cada país tiene su propia particularidad, a veces se necesitan presidentes más socialistas, más humanistas y algunos países necesitan presidentes antiimperialistas, eso depende de cada país. Pero lo que está haciendo el presidente Andrés López Obrador es excepcional en temas políticos, económicos, estamos sorprendidos por el fuerte apoyo social y que nos invite a muchas personalidades nos da mucha esperanza.
-¿Es López Obrador la esperanza de LA?
-Mucha esperanza, México está a la cabeza de la lucha con López Obrador.
-¿Volverá a ser Presidente de Bolivia?
-Seré Presidente, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol.
Entrevista compartida vía www.milenio.com