
En su intervención en el ampliado nacional de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia, el expresidente Evo Morales alertó sobre la grave crisis orgánica que atraviesan las organizaciones sociales del país. “En este momento estamos peor que con gobiernos neoliberales, orgánicamente”, afirmó Morales, señalando que la fragmentación y la persecución a dirigentes han alcanzado niveles sin precedentes.
Morales, recordó que durante los gobiernos neoliberales existían dos grandes confederaciones, la CSUTCB y los llamados colonizadores, pero que, a pesar de las prebendas, los líderes departamentales y nacionales no enfrentaban detenciones prolongadas. “Antes podían detener a un dirigente por cuatro o cinco días, en tiempos de confinamiento por dos o tres semanas, pero ahora nuestros dirigentes están encarcelados y otros tienen mandamientos de aprehensión”.
El exmandatario subrayó que la división interna se ha profundizado: “En La Paz había una sola federación en Caranavi, ahora se han dividido en cuatro o cinco federaciones. Aquí también intentaron contagiar al trópico. Estamos defendiéndonos unidos”, enfatizó Morales, advirtiendo que la atomización y el fraccionamiento debilitan la lucha social.
Morales llamó a la reflexión sobre la importancia de la unidad orgánica para evitar que las organizaciones sociales se diluyan y pierdan fuerza. “No es la primera vez que vivimos así, siempre ha sido así en tiempos neoliberales. Hemos enfrentado y hemos derrotado”, concluyó, instando a los presentes a debatir y fortalecer la estructura sindical para resistir los nuevos desafíos.