El pacto del silencio acordado entre los opositores que impulsaron la ruptura del orden constitucional y el golpe de Estado, en noviembre de 2019, se fractura con el juicio penal contra la exsenadora por los Demócratas, Jeanine Añez, advirtió ayer el diputado por el Movimiento Al Socialismo, MAS, Juan José Jáuregui.
El también presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara Baja, aseguró que con la sentencia contra Añez se pondrá fin a la rúbrica de todos quienes participaron en las acciones que ocurrieron hasta antes del 12 de noviembre de 2019, porque se confirma la tesis de que el golpe de Estado ha sido planificado y financiado por agentes internos y externos.
“Lo que va a suceder con el caso Jeanine Añez en las próximas horas o días, con la sentencia, es que ese pacto de silencio que en algún momento se rubricó por los que participaron en el golpe de Estado de 2019 vaya gradualmente derrumbándose y cayéndose a pedazos, porque van a haber mayores elementos”, sostuvo.
Señaló que existe una suerte de ‘sálvese quien pueda’ al interior de la derecha golpista, porque en los últimos días intentaron posicionar, a través de los medios de comunicación, la voluntad de viabilizar la aprobación de juicio de responsabilidades al interior de la Asamblea Legislativa, así como acusaciones mutuas entre los testigos convocados por Añez que asistieron y los que se excusaron de declarar por no verse involucrados en el caso.
En ese contexto, Jáuregui dijo que se evidenció una planificación previa, una coordinación milimétrica entre los actores cívicos, muchos mandos superiores de la Policía Boliviana y de las Fuerzas Armadas, FFAA, injerencia de las embajadas de Ecuador y Argentina, la participación de jerarcas de la Iglesia Católica, en una coyuntura en la que los medios posicionaban la comisión de un presunto fraude, desconociendo la voluntad del pueblo.
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