A través del Sedeges, la Gobernación de Cochabamba continúa con el monitoreo de la salud de las personas acogidas en los centros de acogida, como es el caso del asilo El Buen Pastor, donde se tuvo el deceso de dos personas a casusa del COVID-19.
La directora del Sedeges, Bárbara Alave, en contacto con la prensa, remarcó que existe un estricto control en el protocolo de bioseguridad en los diferentes centros de acogida, dependientes de la Gobernación.
“Se realizará las gestiones correspondientes para coadyuvar con medicamentos para los ancianos del Buen Pastor, el trabajo se viene realizando continuamente”, sostuvo la autoridad departamental.
En coordinación con el Sedes, agregó, se realizan pruebas rápidas y pruebas de hisopado nasofaríngeo a las personas que son acogidas en estos centros, ante la presencia de algún síntoma de la enfermedad viral.
Al margen de dos adultos mayores fallecidos a causa del virus, otros dos se contagiaron y reciben tratamiento médico en el Hospital del Norte. En el Hogar hay un total de cinco ancianos que están aislado bajo sospecha. El Sedes realiza rastrillajes en dicho centro, ubicado la urbe cochabambina.